Liderazgo de enfermería en las cuatro áreas de la práctica profesional

Cada vez son más vertiginosos los cambios y avances en la sociedad, los sistemas de salud y la profesión, haciendo que replanteemos en ocasiones nuestro rol profesional, adquiriendo nuevos conocimientos, habilidades, competencias, etc. que al final del día se ven reflejados en la calidad de nuestros cuidados.

Generalmente, hablamos y vemos como líder a aquellas personas que están puestos de jefaturas, directivos o que tienen hasta cierto punto una responsabilidad mayor a la nuestra, por ejemplo: supervisores, jefes de servicio, directores de enfermería; olvidando que, el liderazgo debemos de aplicarlo en las cuatro áreas independientemente de si tenemos un puesto de jefatura o no.

Souza e Souza1 ha citado varias definiciones al respecto:

“El proceso de ejercer influencia sobre una persona o un grupo de personas que se esfuerzan por alcanzar su objetivo en determinadas situaciones.”

“Líder es la persona que influye y orienta el rumbo, las opiniones y el curso de las acciones.”

De acuerdo con la revista Forbes México, Amaya2 ha destacado que un líder debe tener habilidades para:

- Logro de resultados (pensamiento visionario y propiciar una visión inspiradora para los demás miembros del equipo, definir metas y estrategias para la puesta en marcha de planes de acción).

- Desarrollo de colaboradores (actuar como coach, reconocer las fortalezas de su equipo, saber delegar funciones y aceptar desafíos y sobre todo promover el trabajo en equipo).

- Comunicación efectiva (utilizar un lenguaje apreciativo, comunicación asertiva, empática y activa).

- Inteligencia emocional (para lo cual requiere desarrollar autoconciencia, regular emociones y manejo de conflictos de una forma constructiva).

- Relacionamiento (producir un impacto positivo, ganar su confianza y mantenerla).

- Gestión (alfabetización tecnológica, empoderar al equipo, conocimientos de planeación, organización, dirección y control).

Ejercer este rol no es una tarea fácil independientemente del escenario en el que nos desempeñamos, pero sí una necesidad actual desde el sistema de salud en general a roles más específicos como lo es para el departamento de enfermería, ya sea desde el ámbito asistencial (ejerciendo influencia positiva en el autocuidado, hábitos saludables, creación de nuevos hábitos, guiar cuidados de manera interdependiente, etc.) hasta el ámbito de gestión donde nos es más familiar sus funciones.

Si bien, cada profesional es responsable de elegir cómo quiere ejercer este rol, lo cierto es que la mayoría se inclina por un liderazgo democrático y en otras ocasiones autoritario, dejando de lado otros tipos que pueden ser más permisivos y con poco o ninguna dirección y control.  

Tan importante es para un jefe de servicio ejercer este rol, como para las enfermeras (os) que están en cuidado directo con los pacientes, para las docentes e investigadoras, es por ello que a continuación, se muestran algunas actividades en las que se ejemplifica cómo lo podemos ejercer en todas las cuatro áreas.

1.    Gestión y administración

Para las enfermeras (os) líderes en esta área es de suma importancia obtener todos los conocimientos y desarrollar las habilidades para poder conducir a buen término:

  • La toma de decisiones

  • Representar al gremio o al equipo de trabajo en reuniones, congresos, ponencias, etc.

  • Dirigir los esfuerzos hacia el logro de los objetivos y metas de la organización como del departamento

  • Mantener una comunicación efectiva

  • Manejo de conflictos

  • Promover un adecuado clima laboral

2.    Docente

Un buen profesor nos inspira a ser mejores, despierta nuestras inquietudes a querer aprender más y en ocasiones pueden llegar a ser vistos como modelos a seguir, por lo que todas las aptitudes y conocimientos mencionados previamente son aplicables en esta área para:

  • Promover el pensamiento crítico, puede sonar muy fácil y como una tarea que siempre se hace desde la docencia, lo cierto es que si le sumas las aptitudes y habilidades de un líder será más satisfactorio para los alumnos

  • Generar un entusiasmo visible en los alumnos que promuevan entornos educativos saludables

  • Impulsar el uso de herramientas tecnológicas en el proceso de aprendizaje

  • Principiar la cohesión de grupo, el trabajo en equipo satisfactorio y participativo

 Para el caso de la educación brindada en ambiente hospitalario o asociada al cuidado de las personas o familiares:

  • Utilizar un lenguaje claro

  • Motivar a la familia y paciente en la realización de los cuidados y promover el autocuidado

  • Otorgar información precisa a familiares y paciente sobre su padecimiento, tratamiento, cuidados, etc.

  • Empoderar a la familia y paciente con conocimiento y desarrollo de habilidades para los cuidados de la enfermedad

 Todo lo anterior, sin dejar de lado la educación continua y participación en talleres, cursos, diplomados y demás recursos educativos que tenemos al alcance ya sea a través de medios digitales sincrónicos o asincrónicos como presencial.

3.    Asistencial

Una enfermera (o) dedicado al cuidado directo que ponga en práctica las habilidades de líder, podría llevar a recuperaciones más prontas de sus pacientes y favorecer una relación de confianza:

  • Promover un pensamiento sistémico en lugar de una respuesta emocional (ser empáticos con el paciente, pero no dejando de lado el pensamiento objetivo)

  • Ser ejemplo para otros profesionales con menor grado de experiencia

  • Ser modelo de trabajo en equipo para otras disciplinas

  • Favorecer una relación terapéutica de confianza con los pacientes y familiares, demostrando conocimiento y habilidades en los cuidados

4.    Investigación

Es el área que le da una base sólida a todos aquellos cuidados que hacemos en nuestra práctica diaria. Al estar en contacto con otras disciplinas, especialistas e inclusive en ocasiones con manipulación de variables humanas, hace que estemos frente a grupos de personas y en ocasiones a cargo de grupos también, por lo que podemos aplicar habilidades de:

  • Trabajo en equipo

  • Establecer relación de confianza

  • Comunicación efectiva

  • Manejo de la ética

  • Resolución de conflictos

  • Representación del gremio

  • Participación en equipos multidisciplinarios

  • Desarrollo de guías de práctica clínica, manuales de procedimientos, libros, etc.

Sin duda, ser líder es una labor para lo cual debemos de prepararnos, mantenernos actualizados en las nuevas tendencias y exigencias en materia de salud en todas sus dimensiones (física, mental, ocupacional, etc.). Ser líder representa una serie de desafíos personales y profesionales, es una responsabilidad ejercer influencia sobre otras personas que hasta cierto punto no todos están dispuestos a realizar.

Seamos líderes proactivos, con valores, capacidad de motivación, responsables del rol que ejercemos, demostrando confianza en lo que hacemos, con una visión clara siendo partícipe del grupo al que pertenecemos.

1.     Souza e Souza LP, Ferreira Cordeiro AL, Nunes de Aguiar R, et al. El liderazgo en la visión de enfermeros líderes. Enferm. glob.  [Internet]. 2013; 12 (30):268-280. 

2.     Amaya M. Las habilidades que un líder debe desarrollar. Forbes México. 2019. 

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