¿Cuidamos la salud o a la enfermedad?
Es cierto que vivimos en un mundo demandante, acelerado, donde cada día nos exige más que el anterior, donde estamos en un constante intercambio con el medio y con los demás, y que sin duda hay repercusiones en nuestro estado de salud.
Hoy en día, es muy común escuchar que debemos cuidar de nuestra salud, apegarnos a hábitos saludables como hacer ejercicio, tener un buen régimen alimenticio, etc., como profesionales en la salud, promovemos con nuestros pacientes, familiares, amigos y con todo aquel que tenemos oportunidad mantenernos sanos e ir al médico en caso de enfermedad, pero realmente ¿tenemos que esperarnos a tener alguna enfermedad para cuidar de la salud y buscar atención médica?
A veces pareciera que se ha confundido si realmente es atención a la salud, o si atendemos y cuidamos enfermedades, generalmente las políticas, programas, inclusive los sistemas de salud, están diseñados para el cuidado de la enfermedad o bien para el cuidado de las personas enfermas y dejamos de lado o nos conformamos con medidas sencillas, y a lo mejor de poco impacto para la población de promoción de la salud y prevención de la enfermedad.
Salud es un término bastante amplio, que no se puede generalizar y tampoco podemos encasillar en una sola definición, si bien, dichas definiciones nos ofrecen una base, un punto de partida o un estándar para guiarnos, sin embargo, no debemos olvidar que todos somos diferentes, que tenemos costumbres y hábitos distintos, creencias, etc. que hacen para cada persona el término salud distinto y, por lo tanto, los cuidados serán diferentes, acordes a cada persona.
Debemos ser más conscientes de nuestro cuerpo, mente y alma, de todos aquellos elementos que conforman nuestra propia definición de salud, y por lo tanto debemos cuidarlos, mantenerlos en equilibrio, no esperar a que se encuentren alterados para cuidar de ellos.
En un mundo ideal y con el fortalecimiento de las medidas de salud pública, la aplicación de principios básicos de enfermería como los propuestos por Nightingale en su libro Notas de Enfermería ¿Qué es y qué no es? podemos revertir lo que hoy día nos es tan común, cuidar la enfermedad de un paciente o si lo vemos desde otra perspectiva cuidar enfermos.
Ante la situación anterior, hay distintos caminos y decisiones que se pueden tomar, con la finalidad de preservar y cuidar la salud por encima de la enfermedad, entre ellos la promoción y prevención de la salud, pero no lo es todo, se requiere de esfuerzos gubernamentales, con intervenciones planeadas a combatir los determinantes sociales de la salud, fortalecer las acciones en salud pública, aprovechamiento de los recursos tecnológicos a disposición, preparación por un lado del talento humano sobre el cambio de visión y por otro la infraestructura con que se cuenta y por supuesto direccionar esfuerzos para el logro de los objetivos del desarrollo sostenible.
Lo anterior representa un reto para todos, seamos más proactivos y conscientes de cada paso que damos en nuestra vida, promovamos más cuidar la salud y no esperar a que sea demasiado tarde para cuidar una enfermedad.